Como una escala
en la música de mi espera,
en la música de mi espera,
revolotean las mariposas azules
que decoran mis cabellos de seda,
y se oye el crujir de una lágrima,
que no sabe,
que ahoga la tristeza,
que ahoga la tristeza,
en ésta,
mi tierra.
mi tierra.
Saber de ti...
Es el sereno cobijando mi respuesta,
que lleva mil saetas
tan dulces y dispersas,
entre el pecho donde yace una estrella,
que parece de helio,
pero es ardiente como cera.
pero es ardiente como cera.
Saber de ti...
Es un terremoto,
un tornado;
un disparo que me llega,
directo al corazón
y al recuerdo
que naufragaba en la tormenta.
que naufragaba en la tormenta.
Saber de ti...
Es un enigma,
una conexión;
es pensar
que te hablo y me contestas,
como dos almas,
que han quedado a la deriva,
esperando sin espera.
Saber de ti...
Es,
de todas mis alegrías,
la más dichosa de mis respuestas.
la más dichosa de mis respuestas.
Hay vacíos y desiertos
ResponderEliminartantos que han quedado en la memoria
hay remansos y oasis
donde el pasado atrapado no es historia,
solo es un receso de la memoria,
Cuando la presión interna vence y deja escapar le presión interna por su válvula de seguridad.
Sea alegría, romance, tristeza o felicidad, Vuestra erupción de poeta la expresa magistral.
Por y para siempre Túyyo, mi cariño, admiración y saludo.
Muchas gracias Fer. Eres muy amable por cada una de tus bellas letras. Te deseo una semana estupenda. Gracias por todo, siempre. 😚
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