¡PURA VIDA!
(César Guevara y Rosa de la Aurora)
Hay
lugares en los que el aire es limpio y fácil de respirar como un amor
que comienza. Y no son necesariamente los lugares típicos, como esos
bellos campos dignos de afamadas imágenes, los trigales inefablemente
amarillos de Van Gogh o imponentes mares donde los ojos mueren buscando
un final de pelícanos y gaviotas con olor a aventura. No. Son lugares
distintos. El abrazo, el beso, el corazón de alguien son de esos
lugares. Aunque no lo parezcan. Y se respira tan bien en ellos. Son
espacios donde la vida, en su estado más puro, reclama prevalescencia y
hegemonía. Espacios de poesía, como la misma vida es poema y poesía.
Son esos lugares, hermosos cofres de sueños dorados, en los que cada nacimiento de sol te incita al agradecimiento, a la visión de nuevas oportunidades e inspirar hasta llenarse del respiro del inmenso y maravilloso mundo que nos rodea; agradecer por la vida del vecino que, si bien puede ser una molestia, te ayuda a aprender las cosas que no debes hacer; del amigo que te sostiene con su presencia, casi como un hermano; de la familia que es tu motor para levantarte y de todas esas situaciones diarias que hacen de ti un vivo propósito.
Son esos lugares, hermosos cofres de sueños dorados, en los que cada nacimiento de sol te incita al agradecimiento, a la visión de nuevas oportunidades e inspirar hasta llenarse del respiro del inmenso y maravilloso mundo que nos rodea; agradecer por la vida del vecino que, si bien puede ser una molestia, te ayuda a aprender las cosas que no debes hacer; del amigo que te sostiene con su presencia, casi como un hermano; de la familia que es tu motor para levantarte y de todas esas situaciones diarias que hacen de ti un vivo propósito.
Cofre de dorado sol es tu presencia, amiga,
hijo, madre, hermano, amante, vecino, compañera…
Cofre-sol y sueños compartidos.
Misterio que hace elevarse el agua desde las raíces,
en la remota tierra,
hasta la última hoja en la copa orgullosa.
Diadema milagrosa es tu existencia,
oh cisne,
jaguar, crisantemo, clavel.
Rosa del bosque,
caudal y salto majestuoso...´
¡Pura vida!
Cascada existencial de la que brotan melodías
cual clavel multicolor.
Retratos, risas entregadas a un abrazo
prendido al cuello glorioso de los años.
Completa el álbum
la alegría de un pájaro que retorna a casa
mientras el hermano perdona,
frente al lago seco de las lágrimas.
Emerge el eco risueño:
un cisne negro pregona, dichoso,
– ¡Todo lo bueno, amigo mío!
Y el nebuloso misterio se torna cántico proveniente del adentro cuando la selva y el cielo se encuentran allá, donde se gestan los arcoíris, para besarse los rostros. Lugares, lugares como el corazón de alguien, lugares que son tiempo, hallazgos, flores. Acaso viajes y momentos. Lugares tangenciales en los que pueden existir, compartiendo agua de lluvia, el cisne noche y una rosa.
Sitios como tú y yo. Libros abiertos cargados de nuevas historias sin escribir.
Relicarios verso y prosa completando el rompecabezas de la esfera, de la cual tu actitud tiene la única llave. La llave que puede elegir la apertura al buen vivir.
La puerta de la vida pura.
¡Pura Vida!
Un beso volado para la Rosa de la Aurora.
Febrero, 2017. César Guevara
Y otro bañado de sol para el Cisne
amigo que canta entre sombras.
Rosa de la Aurora
Febrero, 2017. César Guevara
Y otro bañado de sol para el Cisne
amigo que canta entre sombras.
Rosa de la Aurora