CAFÉ AMARGO
Sin azúcar,
ni sueños bailando;
sin perfiles de humo,
que el aire evaporaron;
sin esperanzas verdes,
ni flores de azahar
de un cuerpo velado.
Sin motivo.
Sin leche.
Esperando...
Un tren de jazminez,
o un avión disfrazado,
de una meta con alas,
de un clamor anunciado.
Des-esperando...
El tiempo vivido,
el tiempo pasado,
un recuerdo marchito;
algún beso olvidado.
Esperando...
El dulce penar,
el impensable trago,
girando en la taza
cual remolino amargo.
Sin azúcar.
Sin anestesia.
Despertando.
De un solo trago...
Café amargo.
Escrito por: Rosa de la Aurora
